
Método de ahorro de los 6 sobres
Escuchando el audiolibro de T Harv Ecker: Los secretos de la mente millonaria pude descubrir el método que plantea el autor para administrar el dinero eficientemente.
Tengo una doble misión. Una centrada en la formación y educación financiera de personas y empresas y otra destinada al plan de carrera de los colaboradores que siguen mi filosofía. Soy experta a la hora de trasladar los conocimientos necesarios para que las personas sepan definir una estrategia de ahorro e inversión que se adecue a sus objetivos personales, especialmente en el largo plazo. Todo ello lo hago a través de un plan de educación financiera que luego se implemente de modo adecuado y sea algo real.
Dado que soy colaboradora externa de un gran broker asegurador español, el conocimiento adquirido gracias a mi filosofía podrá instrumentalizarse posteriormente del modo más adecuado por parte del cliente. Igualmente, puedo servir de puente para que las empresas puedan establecer su propio plan de compensación flexible y de beneficios corporativos.
Escuchando el audiolibro de T Harv Ecker: Los secretos de la mente millonaria pude descubrir el método que plantea el autor para administrar el dinero eficientemente.
Sí, aunque parezca mentira, en un montón de ocasiones las herencias (o cualquier dinero inesperado que recibe una persona de repente) pueden convertirse en un problema.
Cada vez que realizamos una inversión esperamos que nuestro dinero aumente con el tiempo. Nuestra inversión crecerá de acuerdo al tipo de interés que nos ofrezca nuestra entidad financiera pero también crecerá según la estrategia que sigamos.
Cuando alguien nos ofrece un 10%, rápidamente entendemos que lo que nos está ofreciendo son 10 euros por cada 100 euros que invirtamos durante un año.
Uno de cada cuatro adolescentes españoles no sabe nada de finanzas. Es decir, no conoce los aspectos más básicos como interpretar una factura ni si es más rentable comprar tomates al peso o en una caja.
Considera que el sistema público "no es sostenible tal y como está definido hoy en día", por lo que ha abogado por trabajar en la dirección de los sistemas mixtos.
Un buen consultor financiero debe conocer perfectamente el perfil de su cliente (riesgo, capacidad de inversión, situación personal, etc.) y le recomendará productos que se adapten a sus necesidades actuales y futuras.
Un consultor financiero responsable no apremiará a su cliente para que firme algo de lo que no está totalmente convencido. Una frase como “la oferta de este producto termina mañana” debería despertar las alertas en el inversor.
Un consultor responsable y ético le facilitará a su cliente toda la información del producto financiero por escrito, para que pueda estudiarla y revisarla con calma: posibles comisiones, las penalizaciones, los cargos, las tasas de interés, los riesgos, etc.
El consultor no se empecinará en ‘colocar’ productos. Si el cliente no está convencido, se le pueden proponer varias alternativas acordes con su perfil y siempre aclarando las ventajas e inconvenientes que entraña cada opción.
Un consultor debidamente formado puede suponer una gran diferencia económica para el inversor, al optimizar y/o evitar decisiones de ahorro inadecuadas.
Un consultor personal debe ser capaz de explicar sus recomendaciones financieras en un lenguaje correcto para que el cliente entienda y no escudarse en tecnicismos para obviar otros aspectos.
Es recomendable que el cliente se interese por incrementar su cultura financiera. Al fin y al cabo, será el que tome la última decisión de inversión, después de conocer las distintas alternativas que se le presentan.
El consultor financiero debe estar al día de todos los movimientos del mercado y tenerlos en cuenta a la hora de proponer las mejores alternativas de inversión a su cliente.
Robert Kiyosaki y Sharon Lechter
T. Harv Eker
Napoleón Hill
George S. Clason